lunes, 12 de julio de 2010

Por un día, España fue una sola

Se fue el Mundial 2010, se sumó España al exclusivo club de los ocho países que ganaron un título del mundo y el último día dejó, como posible lectura, varias perlas positivas que recuerdan al corto Día y noche, que Pixar y Disney están proyectando en las salas de todo el mundo antes de Toy Story 3.


El corto, escrito y dirigido por Teddy Newton, plantea que "las cosas más hermosas del mundo son las más misteriosas", como un modo de criticar los prejuicios y el temor ante lo desconocido. (Nota: Pixar y Disney no permiten hacer embeds de su corto, por lo cual es necesario verlo en YouTube, en este link o haciendo clic en la imagen).

"Españolito que vienes al mundo, te guarde Dios: una de las dos Españas ha de helarte el corazón", escribía Antonio Machado en 1912. Casi casi una instantánea de lo que este fin de semana vivió el país, con un millón de personas copando el sábado las calles de Barcelona para exigir la autonomía catalana al grito de "Somos una nación, nosotros decidimos" y, veinticuatro horas más tarde, 50 millones de corazones rojos enlazados como uno solo, festejando la hazaña deportiva que en tierras sudafricanas acababa de lograr la selección nacional de fútbol, paradójicamente armada sobre la base del Barcelona Fútbol Club.

"Miedo a lo desconocido" anuncia de pronto la única voz inteligible que se escucha en el recién estrenado corto Día y noche, de Pixar y Disney. Y continúa: "Tienen miedo de nuevas ideas, están llenos de prejuicios basados en realidad en nada, pero basados en... si algo es nuevo, lo rechazo inmediatamente porque me resulta aterrador. Lo que hacen, en cambio, es sólo quedarse con lo conocido. Ya saben: para mí, las cosas más hermosas del universo son las más misteriosas".

¿Qué mejor respuesta a esos prejuicios puede haber habido que el abrazo de Carlos Puyol e Iker Casillas, el capitán del Barcelona y el capitán del Real Madrid, hermanados por la causa roja? Fue una de las mejores fotos de este Mundial, y una de las más comentadas y elogiadas en los blogs españoles (casi tanto como la del arquero besando a su novia periodista apenas obtenido el título, sin poder contener su emoción). "Lo que une el fútbol que no lo separen los políticos", proclamaban varios bloggers.

¿Qué mejor respuesta a esos prejuicios puede haber que, como sudamericanos, reconocer que en Sudáfrica 2010 el papel del fútbol europeo (con España campeona, Holanda segunda y Alemania tercera) fue brillante, pero alegrarnos a la vez de haber visto a nuestras cinco selecciones ocupando nada menos que la mitad del top ten? (La clasificación final de los diez primeros puestos del Mundial 2010 fue: 1-España. 2-Holanda. 3-Alemania. 4-Uruguay. 5-Argentina. 6-Brasil. 7-Ghana. 8-Paraguay. 9-Japón. 10-Chile.)

¿Qué mejor respuesta a esos prejuicios puede haber que el enorme gesto de Andrés Iniesta, el héroe y goleador de la final, que superó las rivalidades de entrecasa, minúsculas e inservibles que separan al Espanyol del Barcelona y recordó a su amigo Dani Jarque, fallecido el 8 de agosto del año pasado cuando su club, el Espanyol, realizaba una gira de verano por Italia?


Iniesta homenajeó ayer a su amigo mostrando una camiseta con la inscripción "Dani Jarque siempre con nosotros". Habían coincidido en cuatro selecciones juveniles y cada vez que se enfrentaban intercambiaban camisetas: tenían más de 20 uno del otro. Tras la final, muy emocionado, Iniesta explicó: “No había podido hacer nada por él en toda la temporada y se lo merecía”.


La mejor España

Con ese título, el artículo editorial de hoy del diario español El Imparcial resume de modo notable lo que vive hoy el país:

"Nunca hasta ahora una selección española de fútbol había llegado tan lejos. Tampoco un pueblo, el español, cainita con demasiada frecuencia y más dado a ahondar la zanja que separa las dos Españas que a tender puentes para superarla. Pero once deportistas han logrado lo que parecía imposible: poner de acuerdo a un país entero en torno a un sentimiento común de alegría y unos colores, los de la bandera, que ayer se exhibían como nunca -y, por fin, sin complejo alguno- por cualquier rincón. El golazo de Iniesta no sólo le daba a España su primer mundial, sino una satisfacción colectiva indescriptible".

"Salvo cuatro o cinco nacionalistas, rencorosos —como es propio de esa mala condición-, toda España ha vibrado con el éxito de un equipo que, magistralmente dirigido por Vicente del Bosque, ha sabido capitalizar las emociones de un país entero. Como quedó ilustrado por el abrazo entre Casillas y Puyol, ayer no se era de izquierdas o de derechas, ni siquiera del Madrid o del Barça; se era de la selección española, y se sentía el orgullo de ser españoles. Sin etiquetas ni distinciones. Por una vez, una España abrazó a la otra, demostrando que el entendimiento en lo sustancial es posible, si hay voluntad de por medio".

6 comentarios:

  1. ¡Qué buen post! Desde España no puedo añadir nada.

    David Torrejón

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  2. ¡Muchísimas gracias, David!
    Para un post como este, tu elogio es doble: porque sos periodista y porque sos español. Me llena de orgullo haber alcanzado el estándar de calidad que esas dos condiciones exigían.
    Un abrazo enorme desde Buenos Aires.

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  3. Panchón,

    Anoche pensaba:
    ¿Qué sentirá el Real Madrid cuando le toque jugar en la Liga contra la selección española campeona del mundo?

    Chiste culé aparte, aquí lo hemos vivido sin prejuicio alguno.


    Un abrazo muy grande desde Barcelona.

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  4. Bueno, Juampablazo, vivir en Barcelona siendo venezolano te da una perspectiva bastante más abierta y desprejuiciada, ¿no?
    Qué increíble, que los primeros comentarios de este humilde post lleguen desde aquel lado del océano.
    Otro abrazo para vos y besos para Ale.

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  5. ¡Muchas gracias, Julia querida!
    Un elogio tuyo no es cualquier cosa, así que el orgullo es doble.
    Pancho

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